La Alimentación Alquímica
La tarea principal de la Alimentación Alquímica es la nutrición de la médula ósea, espinal y el cerebro. Ésta tanto refuerza nuestra vitalidad, como también nos desarrolla. Considerada desde la posición del funcionamiento del cerebro, es un tipo de alimentación geométrica basada en la ingesta de tinturas de cristales e implica conocimientos acerca de las cualidades de la Posición del cuerpo, el Movimiento y la Respiración.
La Posición del cuerpo, su Geometría, implica la habilidad de tomar, absorber o activar la circulación de la energía que mantiene nuestra vida y al mismo tiempo nos alimenta. Es decir, La Alimentación Alquímica considera la Posición del cuerpo, el Movimiento y la Respiración como cierta nutrición íntegra. Una condición peculiar que puede convertirse en obstáculo en este camino, es la presencia del primer nivel de la Respiración Energética capaz de formar el Cinabrio.
La habilidad de cultivar por dentro la alimentación introduce a la Nutrición Alquímica el concepto del Cinabrio, es decir, la capacidad de regeneración de la energía. Si la persona tiene esa habilidad, entonces domina la Alimentación de Cinabrio (o, La Alquímica). En este concepto entra también la capacidad de respirar, moverse, pensar alquímicamente y el Arte de Ingesta de Elixires.
Desde luego, una particularidad de la Alimentación Alquímica es el Cinabrio de los Pensamientos, una condición en la que el cerebro entrena constantemente la consciencia, o, mejor dicho, “la consciencia entrena el cerebro”. Imagínense que tenemos un grupo hormonal en nuestro cerebro y debemos, de alguna manera, “agitar” las hormonas. Precisamente por eso necesitamos la Consciencia de Cinabrio, un pensamiento que debe ser comprendido, cómo se forma correctamente y cómo puede influir en nuestra alimentación.
La Alimentación Alquímica ofrece una fuente de energía adicional y la persona poseedora del Pensamiento de Cinabrio es capaz de obtener esa fuente. Por lo tanto, podemos decir que el pensar correcto es un tipo de alimentación adicional para nosotros. De lo contrario el cerebro se detiene y empieza a descomponerse y desjuntarse.
Oleg Cherne ©
